Estamos en Septiembre, momento en el que la "vida"
vuelve a una cierta rutina, los niños/as están a punto de empezar el colegio,
vuelta al trabajo laboral, Planeta de Agostini nos invita a coleccionar
nuevas propuestas.
Mi verano, como el de muchas personas, ha tenido diferentes
momentos, unos los he vivido de forma más positiva que otros.
El estado energético de mis hijos (a veces volcánico y otras
de caracol) y la relación que han tenido entre ello,s a veces poco amorosa, han
sido de las cosas que no he llevado tan bien. A veces, como humana que soy, no
lo he sabido gestionar como me hubiera gustado. Tengo que reconocer que antes
de psicóloga, soy persona y como tal , tengo el mismo paquete de emociones que
el resto de humanos, limitación de energía y a veces dificultad para
conectar con mis recursos. He bailado, sin ningún orden concreto y con
movimientos a veces repetidos, entre; diversión, frustración, rabia, desespero,
alegría, rabia, calma, amorosa, tristeza, ira, cansancio, curiosidad,
contenta..... Si me preguntas, "¿cómo ha ido el verano?,
rápidamente mi boca contesta "ufff, ha sido duro". Y realmente ni es
una definición justa ni completa, porque mi cerebro me activa los
momentos donde la emoción más intensa no era agradable, y obvia los otros. ¡¡A
veces molesta que nuestro cerebro quiera economizar tanto en energía y en
expresión!!.
Pero "superado " este verano, vuelvo a tener ganas
y energía de mejorarme y ayudar a mis hijos en la labor de crecer física,
mental y emocionalmente.
Uno de mis cambios ha llegado en la trasformación de
la percepción del RECIBIDOR de mi casa. ¡Qué palabra más adecuada! y a veces, zona
poco cuidada emocionalmente. Me planteé. "¿cuál es la primera sensación,
percepción y emoción que quiero tener al llegar a mi hogar?"
Quiero sentir que HE LLEGADO, llegado a mi lugar, a mi
hogar, he llegado a mi refugio, al lugar donde quiero sentir paz, y amor
y poder expresar lo mejor de mí a mi familia.
Y esta ha sido mi idea para conseguir esto;
la PALABRA
RELAX con VELAS que lo iluminan, una FITA (es una marca que se utiliza en la montaña, hecha con
piedras unas encima de otras ,que indica que vas por buen camino), Una PIEDRA DE MONTAÑA (que cogí de
una de mis escapadas a este sagrado lugar) y que me recuerda la naturaleza,
que representa "el aquí y el ahora“ y una PIEDRA CON UNA CASA
DIBUJADA que representa el hogar, el refugio.
Ayer, por primera vez (después de las vacaciones) volví a
casa de trabajar por la noche. Y al entrar me recibió el RECIBIDOR. Con las
palabras RELAX iluminadas con la tenue luz de las velas. Al ver toda la
composición, mi cuerpo lo sintió y de forma natural se relajó, hice un
suspiro, y entré con una sonrisa. Y después vi a mi familia. ¡Qué buena forma
de entrar en un lugar!, de entrar en Tu casa . Es como pasar por un cargador de
energía.
A mí me ha funcionado.
Te lanzo la pregunta. ¿Cómo quieres entrar en casa?, ¿con
que estado quieres estar para ver tu familia . ¿ Que podrías hacer en tu
RECIBIDOR que te pueda ayudar a ello?
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